Una de las cosas más claras que teníamos los Verne desde el inicio de nuestro proyecto era que queríamos situar volcanes en un mapa, ¡tooooooodos los volcanes posibles! Para poder llevarlo a cabo creamos entre todos y todas un mapamundi; primero calcando de la pizarra y después pintando siguiendo la leyenda de colores que encontramos en un mapa del mundo físico. ¡Parecía sencillo!, pero no lo era y… algún que otro retoque tuvimos que hacerle. Una vez acabado y colocado en la pared ya podíamos empezar a situar volcanes.
Días después, Cristina nos preparó Chromebooks y una ficha con los pasos a seguir para poder buscar por internet volcanes diferentes. En pareja debíamos llegar a la Wikipedia y buscar el nombre del volcán que nos había tocado, leer la ficha técnica para localizar dónde se encontraba así como su altura para conocer algo más de ese volcán. Cuando teníamos todos esos datos, podíamos situar nuestro volcán en el mapamundi de la clase.
A medida que todos íbamos situando nuestros volcanes pudimos observar que algunos de los volcanes los conocíamos pues habían sido noticia a lo largo del trimestre (Taal, Whakaari…), otros nos sonaban de los primeros días cuando todos compartíamos nombres que buscábamos en casa (Mauna Loa, Etna, Fuji, Vesubio), y otros, con nombres bastante graciosos, no los habíamos oído nunca (Nyiragongo, Popocatépelt…).
Y como el último día nos quedamos con ganas de seguir utilizando la herramienta de StreetView de GoogleMaps, la hemos utilizado para poder viajar hasta el volcán situado. Algunos hemos tenido más suerte que otros y… ¡hemos podido acercarnos bastante!
Seguiremos buscando nuevos volcanes y los localizaremos en nuestro mapa. Quién sabe, ¡lo mismo los encontramos todos!
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