Per fi, després de dos cursos de pandèmia, hem pogut recuperar aquesta jornada tan especial per a tot el claustre: EL DINAR DE VOLUNTARIAT.

Aquest any hem tingut moltes persones convidades: LA XARXA CREIX! Voluntariat d’escola, auxiliars d’aula, voluntariat de les parelles lingüístiques, voluntariat de normalització lingüística, els ordenances de l’escola i una representació del funcionariat del centre.

Qui millor que ells i elles per explicar-nos perquè és un acte tan important!

Sóc nou  aquí. Em criden per megafonia per presentar-me al búnquer. No han de ser males notícies. Ens han convidat a uns quants interns que ajuden al funcionament de les classes. Jo crec que ells/elles saben que és l’escola qui ens ajuda. A l’escola ets persona. Trobem una gran taula ja parada on tots compartim un gran dinar. Semblaria frívola l’expressió si no fóssim tots a la presó. Quin gran dinar de germanor entre iguals! Somriures, acudits, un bon entrepà, molts agraïments, etc. Per uns moments somriem tots. Gràcies per tot i per tant!

Asistimos a la escuela como alumnos para aprender y como auxiliares y voluntarios para ayudar a aprender y echar una mano a la profesora o profesor. Sin esperar nada a cambio. Nos informan que van a ofrecernos una comida especial para agradecernos nuestra labor. Debo agradecer a la escuela el inmenso esfuerzo que ha supuesto para ustedes prepararnos un rato tan agradable y especial para nosotros. La idea de hacerlo, ir a comprar, organizarlo y prepararlo todo. Es con diferencia el mejor día que he vivido en los últimos casi tres meses que llevo aquí. Habiéndome sentido una persona más. No teníais por qué hacerlo y aun así habéis hecho un gran esfuerzo por y para nosotros. Eso dice mucho como escuela y como personas. Creo que, en nombre de todos y todas, puedo decir que muchísimas gracias y que disfrutéis de unas merecidísimas vacaciones. ¡Hasta pronto! 

Quisiera dar las gracias a todo el profesorado de la escuela por el ratito tan agradable que nos habéis regalado. Más allá de la comida, la cual para nosotros ha sido todo un banquete, lo que más puedo agradecer de todo corazón, es el trato humano que hemos recibido. Durante este medio día me he sentido arropado y querido, casi como en familia. En algún momento he saboreado ese manjar con los ojos cerrados, para no ver los muros de hormigón que nos rodean, pero seguir oliendo y escuchando esas sensaciones tan familiares y agradables. Sé que en mayor o menor medida habéis tenido que hacer un gran esfuerzo para poder llevar a cabo ese evento. Os doy las gracias de todo corazón. Jamás lo olvidaré. Y si algún día nos volvemos a ver fuera de estos muros y rejas, no dudéis que seréis invitados, aunque sea a un café o lo que encarte. Gracias también por la labor que realizáis día a día en la escuela y por darle un poco de luz a esta, nuestra oscuridad. Os deseo una feliz semana santa, estaremos esperando vuestra vuelta con entusiasmo.