Érase una vez un niño, llamado Drácula (pero todos le llamaban Drac) que tenía 90 años. Su vida era muy aburrida y no le paso nada “guay”.
Al cabo de mil ochocientos años su vida cambió de repente. Le pasaron muchas aventuras y hoy os contaré una.
Un “tío” de 1890 años (al cual aún le quedan muchos años de vida) un día llego al Hotel Transilvania, de hacer de guía a los visitantes, como cada aburrido y rutinario día. Muy cansado llegó a su habitación y cuando estaba mirando las fotos de Murray en Instagram, de repente pulsó la pantalla demasiado fuerte con su uña y se le rompió el Iphone 7:
-No importa mí móvil es un anticuado, necesito un Iphone X plus, el más nuevo del mercado.
-Dijo animadamente, porque quería un móvil igualmente. Y se fue en la búsqueda de su móvil.
Por el camino se encontró a Mavis, y le dijo:
-¡Papiiiiiiiiiiiiiii! Me voy de compras.
-Y a mi que- Le respondió Drac.
– Dame 5.000 euros para pagar- Dijo con un tono un poco repelente.
– Ok- Y el obedeció, porque llegaba tarde.
Siguió la búsqueda, pero por el camino se encontró a Dennis y le dijo: -Mami no está y no encuentro a papi para que me compre ese avión teledirigido.
– Siiiiiiiiiiii ya voooooooy- Y volvieron al hotel a buscar a Jonathan. Drac le dio 5.000.000 de euros para comprar ese juguete.
Cuando por fin llegó a la tienda, la tienda estaba cerrada, porque Drac es un vampiro y solo puede salir de noche. Finalmente dijo:
-No importa, las fotos de mi Instagram no son tan buenas.
Blanca Casadó Bartolomé. 5º Escola Josep Riba
