… Erasmus es una de esas aventuras que no se olvidan, no sentimos lo mismo cuando volvemos …
Primero me gustaría presentarme, me llamo Simon Bahno y soy de Eslovaquia. En febrero decidí irme a estudiar a España a Igualada y conocer la cultura española, como vive la gente y realmente experimentar lo que es ser estudiante de Erasmus.
Al principio no sabía qué esperar: nuevo país, nueva escuela, nueva gente y, por supuesto, nueva familia con sus tradiciones y maneras de vida diferentes. Pero ahora puedo decir con seguridad que Erasmus se trata de aprender a amar esa diversidad, explorar el mundo y descubrir la unicidad de cada voz que escuchas y de cada paisaje que visitas.
Definitivamente fue un desafío para mí pasar las primeras semanas en España porque nunca había viajado por más de dos semanas y de repente estaba viviendo una vida diferente en un país que nunca había visitado.
Sin embargo, aprendí mucho sobre mí mismo y también me ayudó a desarrollarme de muchas maneras diferentes; Nunca pensé que sería capaz de superar estos desafíos por mi cuenta. Ahora puedo verlo como una curva de aprendizaje dentro de mi vida, así como un desafío absolutamente fantástico que aprecié y amé cada minuto.
El Instituto de Badia i Margarit había sido un increíble lugar para estudiar y desde el primer día me sentí bienvenido, lo que consideré una gran suerte. La relación entre profesores y alumnos era muy diferente a la de mi país pero solo puedo decir que me encantó. Me encantó que no solo me recibieron con el corazón abierto, sino que también se preocuparon por cómo me siento y si necesitaba algo – por eso gracias a todos los profesores del instituto! Ellos me daron muchos consejos sobre cómo mejorar mi español y también tenía una amplia gama de clases para enriquecer mi estancia allá. También había ido a viajes escolares, lo cual fue una excelente manera de profundizar mis amistades con otros compañeros de clase y conocer más lugares.
Y por supuesto, un gran agradecimiento a la familia de Marc Monclús, porque, sinceramente, su familia hizo mi estancia en España no solo posible, sino que me recibieron con una gran sonrisa. Nunca olvidaré todas las cosas que hicimos juntos, todos los lugares a los que viajamos y también los momentos en que solo estábamos juntos en casa hablando y riéndonos. Tuve mucha suerte de encontrar una familia como la suya de verdad – Gracias.
También tengo que agradecer a todos mis amigos españoles por hacer estos meses lo mejor posible. Tenía todo lo que un estudiante Erasmus podría desear: fiestas, viajes y un grupo de amigos increíbles. Fue, de lejos, una de las mejores experiencias de las que podría haber sido parte.
Me han pedido que describa lo que he pasado estos últimos meses, pero sinceramente, no hay palabras para describir con precisión la experiencia de mi Erasmus. ¡Tienes que experimentarlo! Solo puedo decirte que te prepares para perderte en el tiempo, para pasarte los días y las noches en conversaciones interminables, para descubrir que en realidad te gusta la comida que nunca pensaste que ibas a comer, para conocer tantos lugares impensables donde te sentirás como si estuvieras soñando y por celebrar los días y las noches con las personas que nunca olvidarás!
Gracias por todo,
Vuestro compañero Simon.
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