Con la llegada de la primavera, las niñas y los niños de 1º hemos realizado un pequeño trabajo entorno algunas de las plantas aromáticas que hay en nuestro huerto escolar. Previamente, habíamos ido de excursión al Parc de les Olors de Santa Eulàlia de Ronçana, así que ya conocíamos algunas de estas plantas, así como sus propiedades. Ahora era el momento de explorar nuestro huerto ecológico. ¿Y por qué? Pues porqué, en lengua castellana, estamos inmersos en el proyecto de la primavera y qué mejor manera de terminarlo que creando un mini herbario de plantas aromáticas de nuestro propio huerto.
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¿Sabéis que, en sólo dos cursos, el huerto de la escuela ha pasado de tener tres plantas aromáticas a tener alrededor de veinticinco? Eso fue lo que nos explicó Carlos, un papá del colegio que viene, en muchas ocasiones, a fomentar nuestro aprendizaje en este espacio. Él nos propuso un juego que consistía en oler, a través de un embudo, el contenido de una caja, en la cual se escondía una planta aromática. Sólo mediante el sentido del olfato, las niñas y los niños tenían que descubrir de qué planta se trataba. Muy difícil buscar entre 25 especies, por lo que Carlos les ayudó ubicando el cartel con su nombre sólo en aquellas plantas en que debíamos fijarnos. Con este juego, logramos conocer seis plantas aromáticas: lavanda, ajedrea, manzanilla de Mahón, orégano, romero y melisa. Hablamos de su aroma, de sus funciones y usos y cogimos unas muestras para nuestro mini herbario.
En clase nos pusimos manos a la obra preparando el mini herbario, anotando la información de tres de las plantas descubiertas en nuestro huerto y, una vez secadas las muestras recogidas, las pegamos en el tríptico.
Aquí tenéis algunas fotos de la actividad realizada en el huerto, así como un ejemplo del producto final obtenido. ¡Lo pasamos genial! ¡GRACIAS, Carlos!
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